Una pulsera moderna y brillante, para personalizarla con el color de tus emociones. Los brazaletes de las colecciones Drops contraponen a la silueta esencial de la estructura, dos extremos que nos ofrecen hermosas sensaciones. El símbolo de amor por excelencia, el corazón, enriquece la parte final de la joya. Un emblema mágico para pensar en una persona especial o simplemente para recordar que las emociones más preciosas están siempre en nuestro corazón. Su tono es el más brillante de todos, el color oro, porque nada tiene más valor que los sentimientos. El otro extremo está compuesto por un elemento intercambiable, una pequeña bola de cristal de colores. El tono elegido es el azul que se desvanece en el verde mar, un matiz fresco, positivo y estival. Un color que evoca la libertad y la alegría de vivir, emociones preciosas que hay que conservar siempre. Pero para las miles de esencias de una mujer no siempre basta un color: en efecto, tienes a tu disposición una gama de colores entre los que podrás elegir y sustituir con facilidad en la bola azul. La ligereza del verde, la intensidad del azul y del rojo, la vivacidad del rosa o la luminosidad del naranja: estos son algunos de los tonos con los que podrás expresar tu humor y tu estilo.